El plan: Una generadora de energía para cada municipio
Martín E. Ospina
Gustavo Zuluaga
El mayor símbolo de la pujanza paisa y nuestro mayor orgullo empresarial, las Empresas Públicas de Medellín, están por de celebrar sesenta años de su natalicio; por aquellas épocas la creación de las Empresas Públicas de Medellín fue una labor titánica, casi faraónica, que propicio el salto a la modernidad, la disponibilidad de energía confiable y barata transformo la otrora pequeña y rural Medellín en la prospera capital industrial del país.
Eran épocas de macroproyectos, grandes cadenas de generación hídrica y extensas líneas de trasmisión que conducían la energía de las regiones alejadas del departamento a la gran capital en el valle de aburra.
Llego la hora de revertir el proceso, la Antioquia profunda necesita ser rescatada, hoy tenemos la tecnología y la legislación que, por fin, luego de muchos años de espera nos permite generar energía, a bajo costo, en pequeña escala y en los lugares más remotos de nuestra variada y siempre hermosa topografía antioqueña.
Nuestro plan, ANTIOQUIA FIRME, CON ENERGÍA, consiste en implementar 125 pequeñas plantas generadoras de energía renovable, una por cada municipio Antioqueño, algunas de las plantas serán hidráulicas, algunas serán de biomasa, tal vez algunas serán eólicas y muchas, muchas serán fotovoltaicas.
¿Cómo lo vamos a hacer?
Es realmente muy simple, la resolución CREG 174 DE 2021, viabiliza la generación distribuida, que leyendo a lo paisa dice: si la planta es pequeña, ósea de menos de 1 MW (megavatio), instalado, nos podríamos unir al cable de energía que pasa por la puerta de la casa, (red de distribución), que el permiso no va a Bogotá (UPME) y que el permiso lo da EPM (OR), a bueno y que toca hacer un estudio eléctrico cortico y baratico, (estudio de conexión simplificado), todos los permisos se tardan menos de tres meses y en otros seis meses estamos generando energía.
Que significara tener una pequeña generadora de energía de su propiedad, para municipios alejados, como Peque, Nariño o Yondó, pues significara lo más obvio, energía barata para su gente y barata es muy barata, si le quitamos a la tarifa, los costos de trasmisión, comercialización, compensaciones, los ahorros pueden ser del 70 % o más, pero además la energía que sobre se le venden al sistema (EPM) y esto se convierte en ingresos para el municipio que podrá invertir en cubrir las necesidades básicas insatisfechas de su población, que todos sabemos que son bastantes.
Las cifras no son menores, una planta fotovoltaica de 1 MW vale hoy puesta en funcionamiento y generando energía 3.500 millones de pesos, y produce aproximadamente 2.000.000 k/hr/año, si vendemos el k/hr a 350 pesos, significa que al año se producen 700 millones de pesos. Simple la ecuación, se paga en 5 años, y genera energía durante 25 años.
Otros beneficios como venta de bonos de oxígeno, muy bajo impacto ambiental, ahorro en redes de expansión de EPM, autonomía de las regiones y la generación de núcleos de producción en las regiones más apartadas.
¿Y con qué plata las vamos a construir?
Como lo hemos hecho siempre, en Antioquia nadie nos tiene que regalar Nada; la misma resolución CREG 174 del 2021, obliga al operador de red o sea a nuestras amadas Empresas Públicas de Medellín a comprar toda la energía que se genere bajo esta modalidad de generación distribuida, además le fija el precio al que la tiene que pagar y le fija el plazo para hacerlo.
Mas fácil imposible, EPM nos presta el dinero a los antioqueños, y se lo pagamos con la energía que EPM por ley está obligado a comprarnos.
Que mejor manera de celebrar el cumpleaños número 60 de EPM que, con este regalo para las regiones, que por años han prestado sus ríos para generar la energía de todos los antioqueños.
Atentamente,
Martín E. Ospina.
Abogado.
Ex Secretario de EPM.
Gustavo Zuluaga.
Ingeniero.
Ex ingeniero EPM
