Imposible negar que hay una desazón institucional, un desconcierto alrededor de lo que sucede en el panorama nacional, que nos hace repetir la frase del ex presidente Lleras Restrepo, cuando aludía a un “país descuadernado“, permeado por la corrupción, sin cohesión alguna, polarizado en bandos, con erráticas intervenciones presidenciales, como la que origina la suspensión de Colombia del grupo Egmont que reúne a las autoridades de inteligencia financiera, que en lugar de unir a los colombianos, deja una estela de desesperanza por sus diatribas en contra de la clase empresarial, de las instituciones judiciales, del estamento político, medios de comunicación, la organización electoral, en síntesis, nada es positivo, con airados reclamos de frenar sus reformas, las que evita socializarlas a través del diálogo político civilizado, prueba de ello, la de la salud presentada sin que la misma fuera objeto de análisis previo por los sectores a quienes va dirigida, como con las corrientes parlamentarias.
El país se encamina a un desorden político administrativo, por la débil gobernanza, la inseguridad en todas sus facetas sin que se conozcan medidas efectivas fuera de los consejos de seguridad.
Necio sería desconocer las consecuencias económicas que dejó el paro o protesta de los camioneros, los movimientos insurgentes se hacen cada día más fuertes, azotando un alto porcentaje de las regiones del país, la crítica situación de la empresa de mayor importancia nacional como lo es Ecopetrol, la forma como se maneja las relaciones entre el ejecutivo con el legislativo, unas veces con la fórmula del do ut des (doy para que des), una moral administrativa en quiebra, donde el mal ejemplo cunde desde la cúspide con nombramientos de altos funcionarios con situaciones judiciales, como disciplinarias no definidas, caso embajadores en Nicaragua, Argentina, México, y la FAO, manteniéndolos en sus cargos, a diferencia de otros países que honran su dignidad institucional, que con el solo indicio de responsabilidad son separados de sus cargos.
En Colombia pareciera que estas sindicaciones fueran un trofeo, la dignidad, el decoro y el coraje, son postulados del pasado.
Ahora bien, en ese confuso panorama también la clase política a la que pertenezco, tiene su responsabilidad, cuestionada por sus abusos de poder, opacando aquellos buenos legisladores, estudiosos de la realidad nacional, con los escándalos que a diario la prensa independiente denuncia, la mayoría de ellos a las puertas de las investigaciones por su juez natural, Corte Suprema, en mora de pronunciarse para hacer claridad sobre el comportamiento ético de estos mal llamados representantes populares.
ADENDA UNO. Tremendo enredo se ha originado con la presentación del proyecto que consagra el presupuesto anual de la nación para el 2025, para algunos desfinanciado que origina una propuesta de financiamiento para obtener unos recursos adicionales, para hacer aparecer el faltante de 12 billones como por arte de la magia parlamentaria.
Al obediente y sumiso min hacienda recordarle que está incurso en graves investigaciones penales por el sonado caso de la Unidad de riesgo que puede comprometer su responsabilidad, que lo despoja de cualquier autoridad moral, política y administrativa, para imponerle gravámenes a los colombianos, cuando debería contribuir a revisar la frondosa nómina oficial en el ejecutivo , las nóminas paralelas, para satisfacer cuotas partidistas, coloquialmente denominado “clientelismo“, fuerte de muchos dirigentes que han llevado en el pasado a la quiebra a varias instituciones, tema sobre el cual tiene versado conocimiento nuestro flamante diplomático ante el reino unido.
ADENDA DOS. Preocupante la intención de la Agencia nacional de tierras de adquirir al menos 3.000 hectáreas de un predio ubicado entre las jurisdicciones de Caldas y Risaralda, para ser asignado a la comunidad indígena misak del Cauca, terrenos que hacen parte del parque nacional de los nevados.
Al gobierno nacional manejar este tema con la mayor ponderación posible, por cuanto se pone en peligro la protección del eco sistema de esta importante región referente de la biodiversidad del país.
Para nadie es secreto alguno, la permisión estatal con el movimiento indígena, como soporte del establecimiento oficial.
Suficiente la experiencia tenida con ocasión de la toma del parque nacional durante meses , con los graves perjuicios sanitarios en esa céntrica área capitalina
ADENDA TRES. 23 meses le quedan al gobierno central para reacondicionar su tarea misional, que se atempere, que entienda que se debe gobernar para todos, sin discriminación alguna, menos enfrentamientos, menos invitaciones callejeras, la campaña presidencial terminó hace dos años , recordando que es el jefe de estado, jefe de gobierno y máxima autoridad administrativa por mandato constitucional
Gobernar con el espejo panorámico, más amplio, y con mayor visibilidad.
Por: J.Ferney Paz Q – Exmagistrado
